X-press
martes, 25 de marzo de 2008
Everyday is like Sunday
Luego de casi 1 mes de no postear, (a propósito, el concierto de And One estuvo simplemente increíble) y a pesar que hay un 99.9% de probabilidades que ni un sólo gato solitario haya pasado por este blog durante ese tiempo, debo hacer de todos modos un acto de contrición. La culpa fué de la rutina.
A lo largo de mi vida he oído a algunas personas decir que si hay algo que odian con todito su ser, es hacer siempre lo mismo, casi a la misma hora, en los mismos lugares y de la misma manera, sin que nada rompa ese mecanismo, algo así como un random.
Una de esas personas es mi querida amiga F, por ejemplo, quien adora hacer siempre algo nuevo, adora que la vida le dé sorpresas, sorpresas le dé la vida (a lo Rubén Blades), ir por la vida solucionándole la existencia a quien lo necesite, correr siempre para todos lados porque surgió algo imprevisto, pasando el día con sus cinco sentidos en un permanente estado de alerta, en medio de sobresaltos en el trabajo, con la familia, en las clases de inglés, para al final del día caer rendida en su cama y finalmente quedarse quieta. Y eso, si su exigente esposo se lo permite.
Una de esas personas es mi querida amiga F, por ejemplo, quien adora hacer siempre algo nuevo, adora que la vida le dé sorpresas, sorpresas le dé la vida (a lo Rubén Blades), ir por la vida solucionándole la existencia a quien lo necesite, correr siempre para todos lados porque surgió algo imprevisto, pasando el día con sus cinco sentidos en un permanente estado de alerta, en medio de sobresaltos en el trabajo, con la familia, en las clases de inglés, para al final del día caer rendida en su cama y finalmente quedarse quieta. Y eso, si su exigente esposo se lo permite.
Particularmente yo adoro mi rutina, adoro levantarme cada mañana con una idea muy bien definida sobre cómo se desarrollarán los acontecimientos del día: desayuno, arreglarse para salir, llegada a la oficina, trabajo hasta las 6pm, autobús hasta la casa, ponerme el buzo, seleccionar la música para el mp3 (una de mis partes favoritas del día) y enrumbar a caminar sin rumbo por un buen rato, sólo por el placer que me produce. Claro y de paso hacer algo de ejercicio. Al retornar, a veces una mini-sesión de baile en el cuarto, una ducha, y a tumbarse en la cama o prenderme al messenger, leer los periódicos y ver Magaly TV. ¿Mencioné que adoro hacer varias cosas al mismo tiempo?
No me molesta escuchar la misma música por mucho tiempo, vestir siempre el mismo color (negro), visitar los mismos lugares, etcétera. Prefiero siempre saber dónde estoy parada. Odio las sorpresas, los cambios de planes, la gente que no tiene palabra ("ay sorry amiga, no puedo") y que me cambien el libreto del día sin previo aviso.
Y ustedes?
posted by Nowhere Girl at 14:34
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